La infertilidad es un problema que involucra al 15% de la población. Los avances científicos han logrado establecer tratamientos que fomentan la unión del espermatozoide y el óvulo, sin embargo, no en todos los casos son efectivos, ya que dependen de lo que ocasione la infertilidad.
La cirugía reproductiva es un procedimiento para observar útero, ovarios y trompas de Falopio, con el fin de detectar algún problema que esté provocando infertilidad y siempre debe de ser considerada cuando la paciente tenga antecedentes de cirugías como apendicectomía, cirugías intestinales, cirugía en ovarios, o en trompas de Falopio.
En general existen dos tipos de cirugía reproductiva: Laparoscopía y la Histeroscopía (La cirugía por laparotomía prácticamente ya no se realiza). En este espacio me gustaría compartir con ustedes sobre la cirugía Laparoscopia aplicada a la Reproducción
Laparoscopia
Normalmente la laparoscopia es una cirugía que se realiza en un quirófano con un instrumento óptico que se llama laparoscopio con el cual el cirujano puede observar a través de él, habitualmente se coloca en la región umbilical aplicándose una cámara para observar las imágenes en una pantalla. Además se pueden instalar dos puertos secundarios por donde se introducen instrumentos como tijeras o rayo láser. El tipo de anestesia es general y en la mayoría de los casos la paciente recibe el alta ese mismo día. En general, la laparoscopía puede realizarse para efectos diagnósticos o para reparar algún daño que impida a la paciente lograr un embarazo como por ejemplo adherencias, obstrucción de las trompas de Falopio, reversión de salpingoclasia, quistes ováricos, miomas uterinos o endometriosis. El pronóstico dependerá de la severidad del problema.